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sábado, 30 de noviembre de 2013

Trepador azul (Sitta europea )








Al contrario de muchas aves silvestres que en primavera tienen la costumbre de excavar o de agrandar un hueco para criar, el Trepador Azul reduce la entrada de la cavidad donde se instala. Esta ave es la trepadora más extraña de nuestros bosques. Bien apoyada en sus cortos tarsos, avanza a pequeños trechos, enganchada a la corteza de los troncos, sin ayudarse con la cola como los picos, sino gracias a la fuerte musculatura de sus patas, provistas de uñas aceradas. Por esta razón, no necesita llevar la cabeza levantada hacia arriba como los picos. Recorre con frecuencia los troncos cabeza abajo con la mayor naturalidad del mundo. El régimen alimenticio de este pájaro, compuesto de granos de cáscara coriácea, le ha hecho desarrollar una curiosa costumbre: sujeta su botín en la horquilla de un árbol o en una grieta y martillea avellanas o hayucos con grandes picotazos. Durante el cortejo, el macho vuela frecuentemente despacio o adopta posturas con las plumas esponjadas y alas y cola abiertas. El nido está siempre en un agujero, elegido generalmente en un árbol a más de dos metros de altura, aunque también pueden utilizar cajas anideras. Identificación: Ave pequeña, rechoncha, que trepa ágilmente cabeza arriba o cabeza abajo; de tonos azulados y ocráceos; partes superiores gris azuladas; alas pardas, con ribetes externos claros; cola gris azulada en su parte central, las plumas laterales negras; cabeza con lista negra estrecha desde el pico hasta los lados del cuello; partes inferiores con garganta y parte de las mejillas blancas; pecho y abdomen ocráceos; pico gris pizarra; sexos iguales. Nidificación: Construye un nido de pedacitos de corteza o de hojas secas, normalmente en agujero de un árbol; con frecuencia reduce la entrada con barro para resguardarlo de aves mayores; pone, de abril a mayo, de 6 a 10 huevos blancos punteados con pardo rojizo; incubación, sólo por la hembra, de unos 14 días; los pollos, cebados por ambos padres, vuelan después de unos 24 días. Alimentación: Avellanas, hayucos, bellotas; escarabajos, tijeretas y pequeñas orugas. Hábitat: Bosques.

domingo, 17 de noviembre de 2013

Petirrojo europeo (Erithacus rubecula)




Si hubiera que conceder a una de nuestras aves la palma de la familiaridad, ¿quién se la llevaría mejor que el Petirrojo? Su silueta rechoncha y viva, brincando entre las hojas secas en busca de gusanejos es bien conocida de los paseantes, que no dejan de notar la presencia de esta pequeña bola con pechera de color rojo vivo. De hecho, el Petirrojo Europeo esconde bien su juego, pues su mal carácter podría perjudicar la amistad que se le concede. Pero es de admirar la energía que despliega un animal tan pequeño en la lucha por la vida. En él, el rojo es una señal de alarma, mientras que en los colirrojos, el color de su cola es sólo un medio primitivo de reconocimiento. La visión de otra pechera roja provoca en el petirrojo una serie de actitudes de intimidación que se acentúan hasta que uno de los protagonistas huye, por lo general, antes de llegar a la lucha. El canto delimita el territorio y evita conflictos. Las hembras cantan solamente en invierno, período en el cual defienden un territorio propio, a menos que el tiempo se muestre extremadamente riguroso, en cuyo caso aplicarán todas sus energías a la búsqueda y consecución del alimento necesario para subsistir. A mediados del invierno la hembra comienza a buscar pareja, eligiendo entre los machos que cantan. Identificación: Partes superiores pardo oliváceas; pecho, garganta y frente rojo anaranjado; abdomen blancuzco; sexos iguales. Nidificación: La hembra construye el nido con hierbas, hojas secas y musgo, en un hoyo, agujero de árbol, muro o alero; pone, de abril a junio, de 3 a 6 huevos blancos, casi siempre con puntos y motas pardo rojizas, cuya incubación dura de 13 a 14 días, sólo por la hembra; los padres alimentan a los pollos, que dejan el nido sobre los 14 días; dos crías. Alimentación: Insectos, larvas, gusanos, arañas y bayas. Hábitat: Sotos.

Curruca capirotada (Sylvia atricapilla)




El capirote Parte superior de la cabeza (Píleo). es la marca distintiva que da nombre a esta especie y que permite identificarla fácilmente; el resto de su plumaje es más bien discreto. Muy repartida y con frecuencia bastante familiarizada, es la que con más gusto vive en nuestros jardines. Se acomoda en las matas más diversas, tanto en las salvajes como en los macizos de boj tallado. En marzo-abril, después de haber tomado posesión de un territorio, el macho intenta, con mímicas variadas, atraer una hembra. Durante la parada nupcial, agita tan pronto las alas como la cola, frenéticamente, e infla las plumas del pecho. La muda se inicia a mediados de julio. Las currucas capirotadas apenas se mueven y pasan desapercibidas. Después de un período de silencio, hacia mediados de agosto, se oyen otra vez sus voces claras entre los sotos. Aunque es común criando en casi toda España, aparecen en mayor número en invierno con la llegada de multitud de aves procedentes de otros puntos de Europa. Hacia finales de septiembre arriban las avanzadas, pero es en octubre, particularmente, cuando llega el grueso de aves, que inverna principalmente en todo el centro y sur. Identificación: Partes superiores pardo grisáceo; el macho con capirote Parte superior de la cabeza (Píleo). negro, el de la hembra es pardo rojizo. Nidificación: Nido ligero, construido principalmente por la hembra, de hierbas secas, forrado con pelo y raicillas, en arbustos u otra maleza. Pone de abril a junio, normalmente de 4 a 5 huevos, blancos teñidos de verde y jaspeados de pardo. Incubación, por ambos padres, alrededor de 12 días. Los pollos, alimentados por ambos padres, dejan el nido después de unos 10 días. Alimentación: Mosquitos, orugas y otros insectos; en otoño e invierno, frutos y bayas Tipo de fruto carnoso con semillas.. Hábitat: Sotos.

sábado, 16 de noviembre de 2013

Colirrojo tizon (phoenicurus ochruros)




. Procedente originalmente de las montañas, el Colirrojo Tizón descendió hace ya mucho tiempo a la llanura donde los hombres elevaban edificios de piedra, fuertes castillos, catedrales o construcciones que le recordaron lo suficiente sus roquedos natales. Un trino agrio que parece salir de entre las piedras, y el brillo de una cola rojiza que se oculta cuando alguien se acerca, es con frecuencia todo lo que puede saberse del Colirrojo Tizón. Es un pájaro terrestre, que brinca ágilmente entre las piedras, buscando pequeños insectos. Guando le acecha cualquier peligro se transforma de repente en una bola colérica, que agita la cola con nerviosas sacudidas. El Colirrojo Tizón es muy individualista, e incluso en sus terrenos invernales manifiesta mucha intolerancia hacia sus congéneres, a los que aleja de sus dominios. En primavera el apareamiento está precedido de danzas. Sus reclamos son un corto «tsip» y un «tacc-tacc» de alarma. El canto, un trino en staccato, que emite normalmente desde un posadero elevado, un acantilado o un edificio. Parece que cantan para defender su territorio, incluso cuando no se reproducen. Identificación: Macho en verano principalmente negro y en invierno gris negruzco, siempre con manchas alares blancas; hembra pardo grisácea; ambos sexos tienen obispilloRabadilla de las aves. y cola rojizos. Nidificación: La hembra construye nido de hierba, musgo y raíces en roquedos o en grietas de edificios, a veces bajo una viga o en cajas anideras. Pone, de abril a julio, generalmente de 4 a 6 huevos blanco brillante; la incubación dura de 12 a 13 días y la realiza sólo la hembra; los pollos, alimentados por ambos padres, dejan el nido después de 16 a 18 días; dos crías, a menudo tres. Alimentación: Principalmente insectos; también arácnidos y ciempiés; a veces bayasTipo de fruto carnoso con semillas.. Hábitat: Islotes rocosos, acantilados marinos, interior de edificios viejos, paredes, etc.

jueves, 14 de noviembre de 2013

Lavandera cascadeña (Motacilla flava)

. Esta es una de las más vistosas lavanderas; sus partes inferiores amarillo vivo contrastan fuertemente, en cualquier época del año, con su dorso gris azulado y con su larga cola negra. Tiene una marcada preferencia por las cercanías del agua, especialmente por aguas rápidas. En invierno desciende a los arroyos más bajos, pudiendo encontrarse cerca de mantos de berros, desagües y charcas. La llamada usual es muy parecida a la nota doble «tsi-tsit» de la Lavandera Blanca, pero más metálica y «staccato» y a veces sólo un único «tit». El canto, un estridente «tsii-tii-tii», no se oye con frecuencia. El macho tiene una gran variedad de actitudes en el cortejo. En una de ellas, un vuelo «a cámara lenta», abre la cola en abanico; y en otra corre por el suelo hacia la hembra, adoptando una postura de exhibición de su negra garganta. Probablemente la población que cría en España, y que está repartida por todo el país, es sedentaria, aunque es posible que realice movimientos trashumantes; además, ejemplares de otros puntos de Europa pasan e invernan en relativa abundancia. Identificación: Gris azulado encima, amarillo debajo, incluyendo las plumas de la cola; larga cola negra con lados blancos; garganta del macho, negra en verano, blanca en invierno; hembra ligeramente más apagada. Nidificación: La hembra construye nido de musgo y hierba, revestido con pelos, en agujero cercano al agua; a veces utiliza nido viejo de Mirlo Acuático u otra ave; pone, en abril-junio, normalmente 5 huevos blanco ocráceo, tenuemente manchados de pardo-grisáceo; incubación, sobre todo por la hembra, unos 12 ó 13 días; los pollos cebados por la pareja, vuelan tras unos 12 días; algunas veces dos crías. Alimentación: En su mayor parte insectos, incluyendo moscas pequeños escarabajos, ninfas de libélula; en las costas, pulgas de playa y pequeños moluscos. Hábitat: Montañas y riscos.